A found bookmark Arte

Louis Porter
artista
6 May 2022

A found bookmark es una edición facsímil de un marcapáginas y las páginas entre las que fue descubierto en la London Library.

Desde 2014 he utilizado la London Library -una de las mayores bibliotecas de suscripción del mundo- como lugar de investigación, contemplación y producción artística. Casi un millón de libros se alojan en estanterías de libre acceso organizadas alfabéticamente por temas, lo que permite una forma de deriva literaria.

Durante mis paseos, de vez en cuando encuentro marcapáginas. La mayoría son simples trozos de papel con poco o nada de interés. De vez en cuando, alguno revela algo sobre un lector anterior: un recibo de una comida, un talón, una lista de la compra o de tareas. Más raros aún son los que forman pequeños puentes entre el libro, ese lector desconocido y yo, y por un momento, al descubrir el marcapáginas, siento que en cierto modo conozco a esa persona.

Estos los guardo.

Esta edición realizada para collectors de Chiquita Room es un intento de compartir ese momento de conexión. Este marcapáginas en particular se encontró en un ejemplar de The New Theories of Matter and the Atom de Alfred Berthoud, en el apartado de Química, dentro de las densas estanterías de la sección de Ciencia y Miscelánea. En una hoja de papel cuidadosamente extraída de un cuaderno a rayas, un lector escribe con pulcritud y empezando por el número de Avogadro una serie de recordatorios sobre los fundamentos de la materia. Este marcador representa entonces un punto de partida, pero su presencia entre las páginas del libro sugiere que el viaje del lector, aunque iniciado con compromiso, puede haber sido de corta duración y en eso también indica el final de un viaje. El tenaz deseo de volver a los libros, de dejarlos sin terminar, sin leer o sin entender, es un acto que no tiene correlato digital. Ninguna cantidad de PDFs sin leer o de páginas web marcadas apresuradamente para la autoiluminación puede simular la intimidad de un encuentro fugaz con un libro. Estos sucedáneos digitales son actuaciones huecas, amores no correspondidos o miradas furtivas.

Un marcapáginas no sólo indica un lugar en un libro, sino que representa una pausa, el momento en que la conexión entre un libro y su lector se rompió. Se desconocen las condiciones de esta suspensión, pero su intimidad perdura.